Fotografía de Sarah World |
Cuando llega septiembre,
a veces, uno se deja caer
por destartaladas librerías de viejo
donde el polvo de las vidas
y de los siglos
lucha por escribir el absurdo epílogo
de aquellos ejemplares
hacinados en el olvido.
Ejemplares-vidas que callan sus bocas
cuando ya revelaron el secreto
a millones de ojos que lo propagan.
Vidas-ejemplares que enmudecen
recelosos de espléndidos tomos
en cubiertas verde inglés
y encuadernaciones de lujo.
Y entonces cualquier día de septiembre, decía,
uno entra con cuidado en una vieja almoneda
por no despertar historias dormidas.
Se detiene ante la estantería de pino
y descifra, como puede,
los títulos erosionados al dorso,
aquellos que desafían a la ruina.
Y la ciudad, ese animal alejado, protesta
y el mundo pierde el norte
condenado al monótono engranaje
mientras las hojas amarillas
caen a mi alrededor
de pura lástima.
Hojas muertas por las calles
y en los libros,
como fósiles de un planeta antiguo.
Hojas de otoño en una librería de viejo
escribiendo el prólogo de un abrazo
con promesa de vida.
Cuando llega septiembre, a veces,
uno intenta rescatar
antiguas lecturas
como nuevas pulsiones
que conducen y saben latir
de vuelta al hogar.
Cuando llega septiembre
en una librería de viejo.
Shakespeare Library, Paris. Fotografía de esta web |
Y es que septiembre no es un mes...es una actitud:
me encantó la asociación de septiembre con los libros... y mas que nada porque es el mes de mi cumpleaños....
ResponderEliminarparece que es una actitud entonces, abrazo....
¿Libra? Bueno, te felicito. Parece que los que nacemos en julio y en septiembre, según dicen, son artistas. Gracias por pasar JLO. Un fuerte abrazo desde este lado del charco.
EliminarQué maravillosa librería. En febrero estuve en París y, naturalmente, en
ResponderEliminarla Shakespeare Library........ y también robé una foto :))
Tu poema... me encanta. Estoy de acuerdo, es una actitud que comparto.
Salud-os!!
Gracias Luna Llena por tus palabras y tu visita. Curiosamente estuve en París y no visité la "Shakespeare Library" algo que solventaré la próxima vez que vea París. Este poema está inspirado en una librería de viejo llamada Bokk Inn que está en Palma de Mallorca. Saludos!
EliminarGenial poema. ¡Viva septiembre!
ResponderEliminarLo que digo...una actitud. Un abrazo, Roberto y que viva septiembre.
EliminarMe alegro que convoque al otoño con tan sublime poema, amigo Marcos, sobre todo por lo mucho que temo y evito el verano de días eternos y bochornos plomizos.
ResponderEliminarUn abrazo
Es que, desde el verano, pensamos el otoño como un bálsamo...que, en realidad, luego no es tan real. Aunque creo que para nosotros, saí que septiembre es una actitud. Abrazos ¨Cahiers, gracias por pasar.
EliminarSin duda las apergaminadas páginas de los libros de viejo recuerdan las hojas secas del otoño. Recuerdo el septiembre como una actitud, como dices, el mes de los primeros jerseys, el tiempo cambiante... pero desde el cambio climático septiembre parece -al menos, en Barcelona- una prolongación del mes de agosto.
ResponderEliminarAbrazos!
Borgo.
Claro, en la montaña es otra cosa, Miquel. Me gusta que también entiendas septiembre como una actitud. Que siga siendo así, por mucho cambio climático que nos aborde. Abrazos, amigo!
ResponderEliminarHasta ahora no había visto este poema, precioso como siempre, y tienes razón septiembre es una actitud, no porque sea mi cumpleaños que también, si no porque para mí es el comienzo de muchas cosas, como si de verdad comenzase el año.
ResponderEliminar